Cuando se habla de las complicaciones de la diabetes normalmente se suelen mencionar los pies o las piernas, peo raramente se habla de los daños que esta enfermedad puede llegar a provocar en las manos. Sin embargo, una investigación desarrollada por el departamento de Salud y Rendimiento Humano de la Universidad de Houston, ha encontrado determinadas deficiencias en la destreza y la función sensorial de las manos de pacientes con diabetes tipo 2.
Según cuenta Canal Diabetes, se trata de la primera vez que se documentan resultados de este tipo en los enfermos de diabetes. “Es un concepto muy básico que nadie ha mirado antes. Nadie ha examinado como un paciente que vive con diabetes tipo 2 toca un objeto en comparación con alguien que está sano. ¿Es diferente? Realmente lo es”, han detallado los investigadores en un comunicado.
La responsable del estudio, la doctora Stacey Gorniak, ha detallado que “no sólo estamos viendo los tradicionales problemas con los pies y las piernas, en realidad estamos viendo que la diabetes tipo 2 afecta a las manos. Encontramos cambios en el sistema nervioso central que no se correlacionan con la duración de la enfermedad o la gravedad de la enfermedad, sino que simplemente constatan la presencia de la enfermedad".
Hasta el momento, la mayoría de las investigaciones sobre diabetes tipo 2 y neuropatía se habían centrado en los trastornos del sistema nervioso, tales como el entumecimiento, el dolor u el hormigueo, de las extremidades inferiores. Sin embargo, Gorniak y su equipo han llevado a cabo una evaluación de la yema del dedo; tras realizar una batería de pruebas clínicas tradicionales, que han mezclado con la aplicación de un programa informático similar a un videojuego, cuyo objetivo era medir cómo los participantes movían objetos con sus manos.
Las evaluaciones se llevaron a cabo en el Centro de UH para neuromotor y Biomecánica de Investigación en el Centro Nacional de Rendimiento Humano en el Centro Médico de Texas.
Entre sus hallazgos destaca una disminución de la destreza de las manos y los dedos de los pacientes tipo 2 cuando se realizan tareas de motricidad fina, así como una disminución de la fuerza al agarre.
Las evaluaciones sensoriales también descubrieron pequeñas disfunciones de fibras nerviosas de las dos manos.