La diabetes se puede prevenir; y para ello, tan solo hay que adoptar unos hábitos de vida saludables, tales como comer de forma más sana y practicar ejercicio. Para corroborar esta afirmación, un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad del Sur de Dinamarca en Odense (Dinamarca), ha concluido que las personas que montan en bicicleta de forma habitual tienen un riesgo hasta un 20 % menor de desarrollar esta enfermedad.
Según explica Martin Rasmussen, director de esta investigación publicada en la revista PLOS Medicine, "lo más interesante de nuestros resultados es que aquellos que se iniciaron en el uso de la bicicleta también mostraron un menor riesgo de diabetes tipo 2. Y esto es muy interesante porque la población participante en nuestro estudio eran mujeres y varones de mediana edad y mayores. Es decir, nuestros resultados destacan que incluso para las personas de mayor edad nunca es demasiado tarde para coger la bicicleta y reducir el riesgo de padecer una enfermedad crónica".
El objetivo del estudio era analizar la posible relación entre el uso habitual de la bicicleta, ya sea como medio de transporte o como actividad recreativa, y la reducción del riesgo de aparición de diabetes tipo 2. Y para ello, los autores contaron con la participación de 27.890 mujeres y 24.623 varones con edades comprendidas entre los 50 y los 65 años.
Los resultados mostraron que los participantes que montaban habitualmente en bicicleta tenían un riesgo inferior de desarrollar la enfermedad, siendo este riesgo menor cuanto mayor fuera el tiempo semanal dedicado a pedalear. De hecho, y transcurridos cinco años desde el inicio del estudio, las personas que pasaron más tiempo montando en bicicleta tenían un riesgo un 20 % menor de padecer diabetes tipo 2 que aquellas que, por la razón que fuera –por ejemplo, optaban por otros tipos de transporte con menor exigencia física, caso de sus automóviles–, se negaron a subirse al sillín.
La prevención del desarrollo de diabetes asociado al uso de la bicicleta fue independiente de otros factores de riesgo de la enfermedad, como el tabaquismo, el consumo de alcohol, la dieta o el ejercicio físico distinto del ciclismo.
Para las personas de mayor edad nunca es demasiado tarde para coger la bicicleta y reducir su riesgo de diabetes; tal es así que, como destacan los autores, del estudio, "nuestros resultados sugieren que montar en bicicleta, también en el caso de las personas mayores que nunca lo habían hecho, podría reducir el riesgo de diabetes tipo 2, por lo que apoyan el desarrollo de programas para promover el uso habitual de las bicicletas".
En esta línea, los investigadores Jenna Panter y David Ogilvie, de la Universidad de Cambridge (Reino Unido), apuntan en un editorial del mismo número de la revista, que "los resultados enfatizan la necesidad de la puesta en marcha de medidas de salud pública para apoyar las intervenciones dirigidas a incrementar los hábitos de actividad física en la población".
El estudio aporta nuevas evidencias sobre los beneficios de aparcar el coche y optar por medios de transporte más sanos. Según concluye Martin Rasmussen, "dado que montar en bicicleta puede formar parte de cualquier actividad cotidiana, su uso puede ser adoptado por una gran parte de la población. Es el caso de aquellas personas que, por una mera cuestión de falta de tiempo, no tienen otra posibilidad de practicar ejercicio físico".