Los bebedores de café tienen un 50 % menos riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 que los que no consumen esta popular bebida, según un estudio que atribuye esta conclusión a su efecto antisinflamatorio.
"Distintos estudios prospectivos han revelado una relación inversa entre el consumo de café y la diabetes, mientras que otros no hallaron resultados significativos", ha declarado Demóstenes Panagiotakos, coautor del estudio. Entre los años 2001 y el 2002, los autores convocaron a una muestra aleatoria de más de 1300 hombres y mujeres mayores de 18 años de Atenas para responder a una serie de cuestionarios alimentarios, que incluía preguntas sobre el consumo de café.
El consumo era "casual" si los participantes bebían menos de 1,5 tazas de café por día o "habitual" si superaban esa cantidad. En la investigación participaron 816 bebedores casuales, 385 bebedores habituales y 239 no bebedores de café. El equipo también analizó muestras de sangre de los participantes para determinar los valores de proteínas que son marcadores de inflamación y antioxidantes, que describen la capacidad del organismo de neutralizar a las células dañinas conocidas como radicales libres.
A los 10 años, 191 habían desarrollado diabetes: el 13 % de los hombres y 12 % de las mujeres.
Los participantes que más café consumían eran los que menos posibilidad tenían de desarrollar la enfermedad... y es que un 54 % tenía menos riesgo que los que no bebían café, aún tras considerar el tabaquismo, la hipertensión, los antecedentes familiares de diabetes y el consumo de otras bebidas como la cafeína, según publica el equipo de investigadores en European Journal of Clinical Nutrition.
Los valores de material amiloide en sangre, que es uno de los marcadores de inflamación, explicaron en parte la relación entre el café y la diabetes. A mayor consumo de café, menor valor de amiloide en sangre. "Estudios previos habían apuntado a la misma dirección (...) Ahora tenemos un indicio extra", ha destacado el doctor Marc Y. Donath, jefe de endocrinología, diabetes y metabolismo del Hospital Universitario de Basilea, en Suiza, que no participó del estudio.
Los nuevos resultados tienen el respaldo de un estudio prospectivo del 2013 sobre 836 personas sin diabetes al inicio del estudio, según dijo Panagiotakos. En los siete años siguientes, la detección de altos niveles de amiloide y otro marcador inflamatorio llamado proteína C reactiva "anticiparon la aparición de la diabetes, independientemente de otros factores de riesgo", según aclara el equipo.