La resistencia a la insulina está considerada como una afección en la que las células no responden bien a la insulina y la glucosa permanece en la sangre, y está fuertemente influenciada por la grasa de la dieta, que puede inhibir la entrada de glucosa a las células.
En relacion con esta afección, un reciente estudio, publicado en la revista BMC Nutrition, demuestra que una dieta vegana baja en grasas podría reducir el uso y el coste de la insulina en personas con diabetes tipo 1.
En este sentido, la Dra. Hana Kahleova, autora principal del estudio y directora de investigación clínica en el Comité de Médicos para una Medicina Responsable, ha explicado que "las personas con diabetes tipo 1 deberían considerar que una dieta vegana baja en grasas puede ayudar a mejorar su sensibilidad a la insulina y reducir la cantidad de insulina que necesitan".
Esta nueva investigación es la prolongación de un análisis secundario de un estudio del Comité de Médicos para una Medicina Responsable, de EEUU, que comparó el efecto de una dieta vegana baja en grasas con una dieta con control de porciones sobre el uso y el coste de la insulina en personas con diabetes tipo 1.
El análisis reveló que la dosis total de insulina disminuyó un 28 % (12,1 unidades) al día en el grupo vegano, mientras que en el grupo con control de porciones no se observó ningún cambio significativo.
Según los investigadores, la reducción en el uso de insulina en el grupo vegano, probablemente, refleje una mejor sensibilidad a la insulina, es decir, la respuesta del organismo a la insulina.
De la misma manera, el coste total de la insulina disminuyó un 27 % en el grupo vegano, mientras que en el grupo con control de porciones no se observó ningún cambio significativo.
Otros efectos añadidos fueron una pérdida de peso promedio de 5 kgs., y una mejora de la sensibilidad a la insulina y el control glucémico, así como de los niveles de colesterol y de la función renal en personas con diabetes tipo 1.
Este menor uso de insulina en la dieta vegana baja en grasas refleja un marcador de mejor salud cardiometabólica y de menores costos tanto de tratamientos como de alimentos.