La jornada Diabetes Evolution, inaugurada por el consejero de Sanidad de la Xunta de Galicia, Antonio Gómez Caamaño, y organizada por el Servicio de Endocrinología y Nutrición del Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac) y la Sociedade Galega de Endocrinología e Nutrición, sirvió para poner en valor los avances en el abordaje de la diabetes en Galicia y reconocer la labor de pacientes y profesionales.
Durante su intervención, Gómez Caamaño destacó el impacto del proyecto e-Diabetes, que monitoriza los niveles de glucosa de más de 12.000 pacientes mediante sensores de envío domiciliario, integrando automáticamente los datos en la historia clínica electrónica.
La iniciativa se complementa con la aplicación Sergas Diabetes, que recopila información sobre la actividad física y la presión arterial, contribuyendo a un seguimiento más integral de la salud de los pacientes.
El consejero puso especial énfasis en la trayectoria de la doctora Teresa Martínez Ramonde, jefa del servicio de Endocrinología y Nutrición del Chuac, cuyo liderazgo ha sido clave en la implementación de proyectos innovadores como el hospital de día de endocrinología y la unidad de nutrición del centro.
Además, gracias a su implicación, Galicia participa en el proyecto europeo Cuido de mi diabetes, que ofrece un modelo de atención personalizado y centrado en la prevención y el autocuidado para pacientes con diabetes tipo 2.
Otro de los hitos destacados por Gómez Caamaño fue el Proceso Asistencial Integrado para Diabetes Mellitus tipo 2, que busca mejorar la efectividad de los tratamientos y la individualización de la atención, priorizando la prevención y el diagnóstico precoz de la población de riesgo.
La Xunta ha respaldado estas iniciativas con inversiones significativas de cerca de 80 millones de euros en 2023 para la adquisición de bombas de insulina y sistemas de monitorización de glucosa, así como más de 480.000 euros en el desarrollo de algoritmos avanzados que faciliten la gestión de la diabetes.
Según el consejero, estas medidas contribuyen a una mayor efectividad sanitaria y reducen la variabilidad clínica.