El ejercicio contribuye al control de los valores de glucosa en sangre, pero sería interesante poder conocer qué tipo de ejercicio resulta de más ayuda. De esta manera, un equipo de investigadores acaba de concluir que los "snacks de ejercicio" o períodos cortos de actividad intensa, constituyen la mejor manera de controlar la diabetes.
Tras comprobar los efectos sobre la glucemia de períodos cortos de ejercicio intenso, ejercicio a intensidad moderada por 30 minutos o una combinación de ambos en personas con resistencia a la insulina, se comprobó que los primeros, es decir, los "snacks de ejercicio" resultan ser más efectivos para evitar picos de glucosa y mantener sus niveles estables por más tiempo.
En la investigación, ningún participante ingería medicación, y a todos se les ofreció igual comida en el mismo horario. Los que probaron los "snacks de ejercicio" debieron realizar caminatas cortas e intensas (a 90 % de FCmáx) divididas en 6 series de 1 minuto cada una con 1 minuto de recuperación entre ellas, 30 minutos antes del desayuno, el almuerzo y la cena.
Los que realizaron un entrenamiento combinado hicieron lo mismo, pero además, realizaron caminatas a intensidad moderada y ejercicio de resistencia, mientras que los que se enfrentaron al entrenamiento tradicional sólo caminaron a ritmo moderado durante 30 minutos antes de cenar.
Finalmente, se comprobó que tanto los "snacks de ejercicio" como el entrenamiento combinado producían reducciones importantes en la glucosa postprandial o después de comer, en mayor medida que el entrenamiento tradicional. Como promedio, con los "snacks de ejercicio" antes de las comidas, las glucemias se redujeron en un 12 % a lo largo del día.
Los efectos de la reducción de la glucosa sanguínea se prolongan a lo largo de las horas posteriores al entrenamiento, por lo tanto, favorecen el control de la diabetes, y no sólo ofrecen beneficios tras las comidas.
Al parecer, el ejercicio a elevada intensidad por corto tiempo favorece el rápido ingreso de glucosa al músculo, y por ello, reduce sus valores en sangre con mayor efectividad. Además, lo ideal es realizar períodos cortos de ejercicio intenso divididos a lo largo del día, de manera que se eviten largas horas de inactividad y se incentive a un correcto metabolismo de la glucosa en sangre.